No cabe duda de que a la hora de degustar la gastronomía típica de cualquier país es necesario recurrir a las técnicas tradicionales, las primigenias, aquellas que han ido imprimiendo carácter a la cocina a lo largo de la historia. En ese sentido, en Malta somos unos privilegiados porque nuestra posición en medio del Mediterráneo nos ha otorgado influencias tanto italianas -especialmente sicilianas- como norteafricanas, a las que luego se sumaron las aportaciones inglesas.
Este carácter mediterráneo hace que los ingredientes a los que recurrimos sean, en general, los típicos de este tipo de cocina: productos de temporada como el pescado (lubina, mero, salmonete, pargo, pez espada, atún, cefalópodos), la carne (oveja, conejo, aves), las verduras, el ajo y, por supuesto, el aceite de oliva.
Los malteses los combinamos dándoles nuestro toque especial para hacer algo diferenciado y único.
Antiguamente escaseaban los hornos normales debido a la escasez de leña en el archipiélago, por lo que la comida se preparaba en pequeñas marmitas de barro sobre unas piedras calientes llamadas kenur.
Un sistema que favorecía especialmente los guisos.
Hoy en día, a pesar de la introducción de las cocinas eléctricas y de gas, aún se sigue haciendo el pescado de esta manera. Lentamente, preservando sabores y aromas para que el comensal pueda disfrutar de genuina comida a la maltesa.
Un sistema que favorecía especialmente los guisos.
Hoy en día, a pesar de la introducción de las cocinas eléctricas y de gas, aún se sigue haciendo el pescado de esta manera. Lentamente, preservando sabores y aromas para que el comensal pueda disfrutar de genuina comida a la maltesa.
La variedad de platos es enorme pero hay algunos elementos que constituyen un recurso frecuente, como las masas de harina rellenas. Se usan tanto entremeses como para cosas más consistentes. En el primer caso en Malta puedes pasear e ir picando dos populares tentempiés: el hobs biz-zejt y el pastizzi; tampoco faltarían aceitunas, gbejniet (queso de oveja) o zalzett (salchichas).
Si optas por comer más tranquilamente, puedes encontrar amplia variedad, desde sopas como la de las Viudas (casera por excelencia) a pastas similares a las italianas como los timpana o ravjul, pasando por platos en los que el ingrediente principal es el conejo o el pescado como el stuffa tal-fenek o el lampuki respectivamente.
Y para terminar, nada mejor que un postre tradicional: en forma de pastelillo, como los imqaret, o de relleno, como el helwa tat-tork.
Una sorpresa: en Malta también se consume turrón, aquí llamado qubbajt.
Se celebra este año'11 este fin de semana: 4 y 5 de junio.
Se trata de un evento que ofrece la posibilidad de disfrutar del mejor pescado de Malta, de conocer la tradición de la pesca en Marsaxlokk y de la historia y algunas tradiciones del país, rodeados de un ambiente lúdico:
degustaciones de platos típicos de Malta con el pescado como protagonista, mercado de pescado en el que comprar productos frescos, conciertos y actuaciones de folclore maltés, zona de juegos para los más pequeños ...
degustaciones de platos típicos de Malta con el pescado como protagonista, mercado de pescado en el que comprar productos frescos, conciertos y actuaciones de folclore maltés, zona de juegos para los más pequeños ...
Info obtenida de DESCUBRE MALTA
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